El dÃa sabado el diario El Comercio publicó un artÃculo (que a su vez lo sacó del diario El Tiempo de Colombia) sobre la aparente imbatibilidad de la prensa escrita frente al avance de internet.
Esto contradice los frecuentes rumores sobre la debacle de los periódicos en papel frente a Internet.
Es interesante apreciar las cifras presentadas en el informe del 2006 de la WAN (World Association of Newspapers) (World Association of Newspaper) sobre el incremento de diarios vendidos, la creación de nuevos, y el aumento de inversión en publicidad, que mantiene a la prensa escrita en un sólido segundo lugar. Mención honrosa se merece nuestra región al ser la que más crecimiento ha tenido a nivel global.
(Gráfico cortesÃa de El Tiempo de Colombia)
No todo es color de rosa
El único paÃs que viene registrando un marcado decrecimiento es Estados Unidos, que va perdiendo público el cual se está pasando a medios digitales.
El artÃculo es bastante optimista en cuanto al futuro de la prensa, pero sorprende que no hayan incluÃdo la información presentada en el informe de la misma WAN sobre Tendencias en las salas de prensa 2007.
En este se destaca un necesario involucramiento de los periódicos en medios digitales para asegurar su supervivencia.
Entre los puntos más destacados se pueden resaltar:
1. Periodismo ciudadano. Los bloggers son una realidad que no puede ser ignorada. El cÃrculo periodÃstico considera que la mayor limitación de los blogs es su naturaleza de «pro-am journalism» (fusión de profesional con amateur). Esto impide que alcancen el status de pofesionales, en consecuencia no pueden ganarse la credibilidad total del público (¿y los periódicos si?).
A pesar de esta limitación, el público de los blogs crece como la espuma, por lo tanto es un recurso que deberÃa ser adoptado por la prensa, hallando alguna fórmula que integre el trabajo de periodistas profesionales con el periodismo ciudadano.
2. Los websites de los diarios ya no sólo exhiben texto sino toda clase de material multimedia (videos, infografÃas, podcasts, etc). Las salas de prensa no están preparadas para producir estos materiales con la inmediatez que se necesita. Por ello una buena alternativa son las alianzas con productores que tengan capacidad para producir contenidos multimedia rapidamente.
3. Los periódicos deben convertirse en portales para su comunidad local. Un referente obligatorio para saber lo que ocurre en cada paÃs. Debe existir una tendencia a bajar la carga internacional (menos copy/paste de Reuters y compañÃa) y apostar más por la producción informativa de lo que sucede en el espacio nacional.
4. La inclusión de los jovenes como público puede ser exitosa si se aprende algo del fenómeno de las redes sociales (HI5, Orkut, MySpace). Existe una clara oposición entre los llamados «nativos digitales» y la prensa clásica. Para los primeros, el medio es un espacio al cual pertenecen y sobre el cual pueden influir (recordar la campaña MTV…Generado por mÃ), mientras que para los periódicos tradicionales el público es un ser pasivo que necesita ser iluminado por el profesionalismo de los periodistas. Debe encontrarse un punto de conciliación entre ambas partes.
5. Sindicación de contenidos a través del RSS. Se debe aprovechar el potencial de la tecnologÃa RSS para ofrecer un diario personalizado a las necesidades del público. La generación de contenido deberÃa ir de acuerdo a la demanda del lector y no de la agenda propuesta por el comité editorial. Esto permitirÃa la creación de diarios de interes para muchos públicos en simultáneo.
6. El modelo tradicional de suscripción de pago en periódicos en papel no funciona en internet. El nuevo modelo serÃan los micropagos para acceder a contenido especial dentro del gran bloque de contenido gratuito ofrecido por el mismo diario (se me ocurre el uso de teléfonos móviles como la mejor plataforma de pago para este modelo).
En conclusión si complementamos el reporte del 2007 a lo ya expuesto en el artÃculo que mencioné al inicio, tenemos como idea final que difÃcilmente los diarios desaparecerán en los próximos años.
Pero para asegurar su supervivencia deben fusionarse a los medios digitales para generar una nueva amalgama, un nuevo medio profesional de comunicación.